Es el procedimiento para tratar las cicatrices causadas por eventos desafortunados como quemaduras, secuelas postquirúrgicas como cicatrices por apendicitis, cesáreas, peritonitis, entre otros. Debe saber que las cicatrices no se pueden borrar o desaparecer de manera milagrosa, pero gracias a la cirugía plástica reconstructiva es posible mejorar notablemente su apariencia, haciéndolas menos visibles.
Dependiendo de su ubicación, coloración, textura y forma se identificará el tipo de cicatriz y el procedimiento quirúrgico adecuado para tratarla. El manejo va desde la simple resección, es decir, volver a hacer la herida para darle esta vez un manejo más cuidadoso, hasta procedimientos más complejos que implican trasplantar y transponer tejidos desde otras partes del cuerpo.